Aunque el porcentaje es relativamente bajo respecto al conjunto de accidentes que se producen, no hemos de obviar esta causa de accidente, dado que en datos de 2010, en España fallecieron 8 personas, 40 resultaron graves y 445 heridos leves.
Entre los animales silvestres que causan más accidentes, cabe destacar el jabalí (31%). Estos accidentes se producen en mayor medida en las carreteras convencionales de zonas rurales, siendo vías de estrecho ancho de vía que dificultan las maniobras evasivas y donde los animales silvestres tienen pocas barreras para cruzar el asfalto. Influye también en gran medida la abundante vegetación existente en los márgenes de la vía, que dificultan el poder prever la aparición del animal silvestre en la calzada.
En el siguiente post explicaremos cómo evitar estos accidentes que además de ser muy desagradables y provocar importantísimos daños a nuestros vehículos, resultan mortales para los animales silvestres y para los ocupantes de los vehículos implicados.
COMO EVITAR UN ACCIDENTE CON UN ANIMAL SILVESTRE?
Cada vez más fabricantes de vehículos (especialmente de alta gama) desarrollan sistemas que previenen la colisión nocturna con animales silvestres o domésticos. Estos dispositivos de visión mediante infrarrojos y lectores térmicos visualizan en un monitor (pantalla del navegador o multimedia) del vehículo posibles obstáculos que se cruzan en la trayectoria del vehículo a una distancia aproximada de hasta 150 metros. Para alertar al conductor activan señales acústicas y visuales, e incluso activan sistemas de frenada automática.
En tanto estos sistemas no estén incorporados en todos los vehículos, los conductores podemos evitar estos lamentables accidentes implementando las siguientes medidas:
• Prestando especial atención a los trayectos por vías rurales o que atraviesen parajes de vegetación frondosa.
• Cambiando de luces de largo alcance a luces de cruce en el momento en el que visualicemos al animal cruzando la vía, frenando de forma progresiva de forma que no perdamos el control del vehículo y alertar al animal mediante el uso de la bocina o claxon del vehículo.
• Reducir la velocidad al pasar por zonas que linden con bosques o zonas de pastoreo. A una velocidad de 60 km/h precisamos de 35 metros para parar totalmente el vehículo, mientras que circulando a 100 km/h la distancia de frenado se incrementa a los 79 metros.
• Evitar aquellas maniobras de evasión que impliquen una pérdida de control del vehículo, dado que pueden provocar invasión del carril contrario, salidas de la vía e incluso colisiones frontales con taludes, árboles o caídas del vehículo por barrancos, cuyas consecuencias lesivas serán muy superiores que las que se producirían en una colisión frontal con el animal que cruzaba la vía.
Si la colisión ha sido inevitable, tras el accidente debe:
1. Detener el vehículo de forma controlada, advirtiendo al resto de vehículos que circulen por la vía esta circunstancia, mediante el uso de chalecos reflectantes, triángulos de advertencia de peligro, activando las luces de emergencia del vehículo.
2. Iniciar las medidas de auxilio de los ocupantes lesionados y
3. Comunicando rápidamente el accidente al teléfono 112.
En el caso de producirse el atropello del animal, aunque no existan daños personales ni materiales, es imprescindible comunicarlo a la policía para que adopte las medidas necesarias para evitar que otro vehículo pueda accidentarse en el mismo lugar.